Clérigo musulmán autoriza a las mujeres a amamantar a sus compañeros de trabajo
El periódico independiente egipcio "Al Shuruq" en su edición digital ha informado que el Tribunal Supremo Administrativo ha ordenado la rehabilitación del jeque Ezat Atiya y lo ha amonestado por la emisión de su edicto religioso.
Ocurrió en Octubre de 2007 cuando en la Universidad de Al Azhar, que era donde trabajaba Atiya como profesor, decidieran sustituirlo por haber emitido una fetua en la que aseguraba que si la mujer ha amamantado a un varón adulto cinco veces se convierte en su "madre de leche" y de ese modo los dos pueden trabajar a solas en el mismo despacho.
En la tradición islámica se considera ilícito que una mujer esté a solas con un hombre con el que pueda contraer matrimonio, por lo que sólo puede permanecer en solitario con su padre, hijos, sobrinos, hermanos o algún otro pariente o miembro de su misma familia.
Entonces la institución de Al Azhar consideró que la fetua era un insulto al islam y una humillación a la mujer.
Emitió un comunicado para aclarar que esta fetua "contradice todos los principios de la religión islámica y la moral, además de dañar a Al Azhar como una institución islámica respetable".
El tribunal no ha considerado suficiente el que Ezat haya pedido disculpas por la emisión de dicho edicto, asegurando que la había emitido para un caso concreto y no para un uso generalizado.
Ocurrió en Octubre de 2007 cuando en la Universidad de Al Azhar, que era donde trabajaba Atiya como profesor, decidieran sustituirlo por haber emitido una fetua en la que aseguraba que si la mujer ha amamantado a un varón adulto cinco veces se convierte en su "madre de leche" y de ese modo los dos pueden trabajar a solas en el mismo despacho.
En la tradición islámica se considera ilícito que una mujer esté a solas con un hombre con el que pueda contraer matrimonio, por lo que sólo puede permanecer en solitario con su padre, hijos, sobrinos, hermanos o algún otro pariente o miembro de su misma familia.
Entonces la institución de Al Azhar consideró que la fetua era un insulto al islam y una humillación a la mujer.
Emitió un comunicado para aclarar que esta fetua "contradice todos los principios de la religión islámica y la moral, además de dañar a Al Azhar como una institución islámica respetable".
El tribunal no ha considerado suficiente el que Ezat haya pedido disculpas por la emisión de dicho edicto, asegurando que la había emitido para un caso concreto y no para un uso generalizado.
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