Se divorcian porque el marido se pasaba el dia limpiando
Christian Kropp, un juez de familia de la localidad alemana de Sondershausen, ha declarado a la prensa sin dar nombres, que nunca había visto un caso igual en su larga carrera como mediador de conflictos de pareja.
Un albañil obsesionado por la limpieza, se pasaba el día poniendo orden, recogiendo la casa y moviendo muebles. Su esposa lo ha dejado tras 15 años de matrimonio porque no aguantaba más que su marido se inmiscuyese de forma permanente en las labores del hogar y de forma obsesiva asumiera las tareas de limpieza.
Todo estalló hace unos dos años, cuando al regreso de un largo viaje, la esposa se encontró con que el marido había redecorado toda una parte de la casa, incluso había derribado un tabique y levantado una nueva pared sin consultarle.
En el proceso de divorcio, el marido argumentó que detrás de un armario surgía el mal olor y que cuando movió el mueble la pared estaba enmohecida. Tiró los muebles, derribó la pared y redecoró todo el habitáculo.
Su esposa, bastante indignada ha conseguido el divorcio, ya se habían puesto de acuerdo en el reparto de rentas y llevaban un año viviendo en casas separadas, por lo que no ha habido ningún problema para concedérselo.
Un albañil obsesionado por la limpieza, se pasaba el día poniendo orden, recogiendo la casa y moviendo muebles. Su esposa lo ha dejado tras 15 años de matrimonio porque no aguantaba más que su marido se inmiscuyese de forma permanente en las labores del hogar y de forma obsesiva asumiera las tareas de limpieza.
Todo estalló hace unos dos años, cuando al regreso de un largo viaje, la esposa se encontró con que el marido había redecorado toda una parte de la casa, incluso había derribado un tabique y levantado una nueva pared sin consultarle.
En el proceso de divorcio, el marido argumentó que detrás de un armario surgía el mal olor y que cuando movió el mueble la pared estaba enmohecida. Tiró los muebles, derribó la pared y redecoró todo el habitáculo.
Su esposa, bastante indignada ha conseguido el divorcio, ya se habían puesto de acuerdo en el reparto de rentas y llevaban un año viviendo en casas separadas, por lo que no ha habido ningún problema para concedérselo.
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