Un periodista se salva gracias a un crucifijo
Hugo Cuartas y su compañero Carlos Mesa, salían de presentar un programa de música en un canal de la televisión local de Manizales - Colombia y cuando iban a coger un taxi fueron asaltados por dos hombres armados que dispararon al periodista.
"Yo me subo al carro y observo que Carlos Mesa está forcejeando con un joven. En ese momento pasó un vehículo con unos conocidos, a quienes les hice señas para que se dieran cuenta de lo que sucedía y es ahí cuando el hombre se sube al automóvil y me dispara a quemarropa", precisó Cuartas.
"Yo sentía como un ardor en el pecho y cuando me quitaron la ropa observé que tenía el Cristo que siempre me acompañaba pegado a mi cuerpo y destrozado", agregó el periodista asegurando que su devoción lo salvó de morir
Los asaltantes lograron huir, llevándose consiguió el ordenador portátil donde los periodistas guardaban cientos de piezas musicales.
Hugo tendrá que ser intervenido quirúrjicamente porque el disparo le atravesó en un principio el brazo izquierdo y le causó fracturas que deberán de ser atendidas. La bala que se dirigía al pecho impactó con su crucifijo de madera.
"Yo me subo al carro y observo que Carlos Mesa está forcejeando con un joven. En ese momento pasó un vehículo con unos conocidos, a quienes les hice señas para que se dieran cuenta de lo que sucedía y es ahí cuando el hombre se sube al automóvil y me dispara a quemarropa", precisó Cuartas.
"Yo sentía como un ardor en el pecho y cuando me quitaron la ropa observé que tenía el Cristo que siempre me acompañaba pegado a mi cuerpo y destrozado", agregó el periodista asegurando que su devoción lo salvó de morir
Los asaltantes lograron huir, llevándose consiguió el ordenador portátil donde los periodistas guardaban cientos de piezas musicales.
Hugo tendrá que ser intervenido quirúrjicamente porque el disparo le atravesó en un principio el brazo izquierdo y le causó fracturas que deberán de ser atendidas. La bala que se dirigía al pecho impactó con su crucifijo de madera.
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